Educación pública
Paro nacional de una semana en las universidades públicas
La medida de fuerza, que se extiende del 11 al 16 de agosto, incluye el cese total de actividades en 57 universidades nacionales en reclamo de paritarias y mejoras salariales.

Continúan los reclamos universitarios hacia la gestión de Javier Milei
La Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional del Nordeste (ADIUNNE) inició este lunes un paro nacional por una semana, con cese total de actividades en las universidades públicas del país. La medida, que se desarrollará del 11 al 16 de agosto, responde a la falta de paritarias desde el inicio de la gestión de Javier Milei y a la caída del poder adquisitivo de los salarios docentes.
Desde el gremio señalaron que, en los últimos dos meses, no se registraron aumentos salariales y que gran parte de la docencia percibe haberes por debajo de la línea de pobreza, estimada en $1.128.398. Un cargo auxiliar con dedicación exclusiva (40 horas semanales) recibe un salario básico de $743.063, mientras que un/a docente preuniversitario/a (25 horas semanales) percibe $636.074.
En un comunicado, ADIUNNE advirtió que:
“Los salarios docentes universitarios y preuniversitarios sufrieron la mayor caída de la historia”
Y alertó sobre el riesgo de que el ciclo académico 2025 no pueda desarrollarse con normalidad. Indicaron que ya se produjeron 10.000 renuncias y que persisten vacantes sin cubrir, lo que compromete el funcionamiento del sistema universitario.
La protesta se enmarca en un plan de lucha que continuará después del 16 de agosto, con paros rotativos de 48 horas semanales hasta el 7 de septiembre. Durante las jornadas de paro no habrá clases, exámenes, actividades de investigación, extensión ni gestión administrativa.
ATE CONICET Chaco expresó su apoyo a la docencia universitaria
Desde ATE CONICET Chaco manifestaron su respaldo al paro nacional de la docencia universitaria, destacando que “la universidad pública, gratuita y de calidad es un emblema de nuestra democracia”. Señalaron que el ajuste presupuestario impuesto por el Gobierno nacional también afecta a los trabajadores del sistema científico, que en muchos casos cumplen funciones en las aulas y en proyectos de investigación. “La Universidad y la Ciencia siguen en lucha. No nos han vencido”, remarcaron.